Momentos...

El escribir se ha vuelto una manía casi puesta al borde de lo melodramático, me ha hecho soñar, crear, imaginar, amar y odiar, me ha hecho conocerme y saber que soy, la verdad es que pretender ser un escritor en un país tan desculturizado como el mío, es casi un sueño, es un anhelo conseguido por pocos, y es aun mas, porque como nos gusta vivir tanto del pasado, todos los grandes que yacen descansando en paz, siguen viviendo en el colectivo y no se abren a conocer a nuevos escritores contemporáneos que tienes muchos argumentos para forjarse un nombre en la literatura chilensis.
Mi primer libro se llama " de Amor y de lo Otro" y reúne mucha poesía cursi lisia y también un poco de antipoesia que realmente me apasiona, pues no todo puede ser color de rosas en nuestros tiempos, o no?, la constancia y la perseverancia me harán lograr mi objetivo y podré sacarlo algún DIA, pero por ahora, solo esperare y lo iré mostrando paso a paso para ustedes, mis ideas sin valijas están claras, mi futuro no lo se, jajajajajaja! espero un poco de comprensión para conmigo y la obra del poeta Chileno.
Un beso enorme a mi hijo y pa mi amor, ay les va la primera patita:

PRIMISA DEL AMOR







La mañana llega extenuada,
Tanto alboroto inaudito,
Producto del amor en exceso,
No pretendo ser excéntrico
Al referirme de esta forma
A los acontecimientos
Que en estos escritos he de referirme:
Quiso herirme con su cintura
/ Curvilínea,
Me ato de pies y manos con sus cabellos,
Trazo línea tras línea,
Con su figura en el colchón
Centuriones llamados a atacar,
Me empapo
Y dilato esto hasta el amanecer,
Mis instrumentos
Ahora llámense calores,
En mis ojos una semilla
Y en tus labios
/ gemidos,
¿Amos que pretendisteis
/ Con mi ser?
¿Quemarlo quizás
/ Queríais?















Tu amor como un campo
De flores interminables,
Pétalos de tus pies por doquier
Flores de bustos
Y tallos de piernas eternas,
Tú figura como los surcos
Divisados a lo lejos,
Señora mía, no es por el hecho
De reconocerla en una flor,
Su hermosura brota aun más,
Yo como una abeja
Comiendo de tu polen erecto,
Y aun más es el acierto,
De que en primavera germina
Tu lecho maternal,
Y que me invita a deleitar
Mi paladar envolviéndome
En los campos de el acto liberal,
El río cristalino
Que quiebra de norte a sur,
Que invita a beberte
Desde tu cabeza hasta tú ombligo
Y pasar a saludar al señor sol que se refleja
En el monte de la diosa,
Y se recorre
Germinado lo divino,
Mujer que te reflejo
En una girasol,
Española he indígena,
Con tus pétalos regalados,
Al señor sol que te ilumina
Y que te regalas para amar.













Tus amores como el tiempo,
Esa espera interminable que tuve
Para encontrar asiento,
Y ver el espectáculo de tu cuerpo
Sin aliento,
Enredado en tu apartamento,
Los minutos volátiles
Nos declaran el tiempo extinto,
Que se posa en tu entrepierna,
Y beber solo un sorbo,
De la vid que me ahoga de solo mirar,
Con un reloj en la pared,
Que toma constancia del tiempo
Que me toma recorrerte solo con mi boca,
Que con firmeza y sin titubear
Nos mira revolcándonos en el desván,
El minutero presente
Que no entiende
Y critica tus pechos candentes,
El segundero se muestra ausente,
Parece estar celoso
Porque trata de avanzar hacia tu lado oscuro,
Que se llena de mí,
Y en alfombra tock, tock,
Pasa el lapso, tock, tock,
Solía imaginarlo estando abajo
Y celebrando el momento pleno
Sin tiempo pero se intrometen,
Cual bolleristas disfrutan con nuestro evento,
Que pleno alberga el mejor tiempo de todos,
El tiempo junto a ti.
















La música orquestada
Que surge del roce de mí ser indeleble
Con tu piel coqueta,
No es más que un temible presagio
Auditivo y sonoro
Que retrata el regalo perfecto
Del ser amado,
La plenitud ingenua
Y que insinúas con gemidos
Pavorosos y ensordecedores,
Logran convencerme a continuar una vez más,
A lograr después de horas
Revolcándome en las notas musicales
De tu cuerpo,
Para refugiarme en tu música
Tocada con el violín de tus castas ebrias,
Acariciar la guitarra perfecta
Y tocar las notas exactas para acerté acabar,
Y palpar el sonido íntimo
Suicida que se coge de mis oídos,
Por eso te Amo
Por la música que produces
Y que no he de cantar,
Hasta cuando logre tocar
El acordeón con el corazón
Vestido y listo para amar.