jueves, 3 de agosto de 2017

PELAFUSTÁN



***

   Que es esto que se pega en la piel
como infección
que esto que te pasa por las venas,
que te corroe como oxido.
que es esto
que te quita el oxigeno
que te hace querer ser mejor persona.
quizás sea tu boca que quiero alcanzar
y que se esconde como bandida,
es acaso tu silueta en la desgracia de mis pensamientos,
es mirar a la pared que se desgaja a lo negado
o mis ganas puestas al borde del pavimento.

   Soy yo, y mi afán
eres tú y tu pelo matizado
es el viaje hasta la humedad
el fuego tácito en tu frio cuerpo.

   Mi vida ha sido un defecto
el cual podría enumerar,
en honor a la verdad
cagarla es más bien un deporte,
pero al abrir mi corazón de par en par
tuve la esperanza de ser mejor humano,
trascender a la posteridad
y que mi amor hacia tu cuello no sea en vano.
   Y, los retorcijones de guata
que por encanto vienen por los filósofos de pacotilla
desaparecen en un instante por tu susurro.
   Mis achaques de treintañero
pasaron a mejor vida,
por tu murmullo
llamándome en las mañanas post salida,
y no por ser un pelafustán
me privo de querer cortejarla
como dios manda mi querida señorita
por más marejadas que me peguen a la cara
por más llantos de su fan club.

   El anti poeta murió el mismísimo día
que te cruzaste por mi teléfono
(por mi iphone pa´ sonar más cachetón),
dio paso al típico pepe le pew
enamorado de noche y de día
frenético pero un mero estorbo.
   Entonces pensé en que el corazón debe hablar
sin encasillar algo tan sano,
no ponerle tiempo
si no solo detenerlo cuando te tenga entre mis brazos,
hacernos uno todos los días del año
hasta los feriados si lo prefieres,
caminar por la costanera
hasta verte rendida,
y las noches ardientes que pretendo darte,
colarme en tus sueños y en tus ganas
quitar tu brasier hasta verte blandida
                                                                     /en mí.

   No te espantes mi bien
si te dibujo en mis cuadernos
en las murallas, en el metro,
soy solamente yo
sin maldad y con esmero,
que quiere hacer de ti
la Ana Ajmátova de mis sueños,
y en este mundo obscuro
hacerte un paralelo
para que "al escuchar el trueno
me recuerden
y quieras más tormentas"
que provocan mi vuelo.

   Me declaro chiflado
de tu sonrisa y tus pestañas
me declaro en rebeldía de cordura
y me comprometo a ser un locuaz
por las mañanas,
y un amante empedernido y audaz
en las tinieblas.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Señor Q ❤